Para la Congregación de Misioneros Oblatos de los Corazones Santísimos, el proceso formativo se entiende como un itinerario de discernimiento personal, comunitario y continuo que conoce cinco dimensiones establecidas en la Ratio Formationis: Humano-afectiva, Espiritual, Comunitaria, Académica y Pastoral; este camino formativo se desarrolla a través de las siguientes etapas: Animación Vocacional, Aspirantado, Pre – Noviciado, Noviciado, Post – Noviciado y Formación Permanente. Para los Hermanos Coadjutores la formación permanente comienza con la emisión de votos perpetuos.
El órgano rector que dirige este proceso es el Equipo de Formación Oblato (E.F.O.) liderado por el Padre Vicario General de la Congregación quien, orientado por los lineamientos congregacionales establecidos en la Constituciones, la Ratio Formationis Oblata, el Directorio del E.F.O., el Plan de Formación Oblato, los Reglamentos de cada etapa y el Proyecto de Vida Personal y Comunitario, ofrece un norte claro de discernimiento a los candidatos que anhelan abrazar la vida oblata.
Por lo anterior, el E.F.O. se propone a través de estas etapas, alcanzar una plena madurez humana y espiritual de los formandos; para esto la formación ha de ser completa y progresiva. Completa, esto es, que realice en el candidato el desarrollo del hombre, del cristiano, del oblato, del religioso y del sacerdote. Progresiva, es decir, adaptada armónicamente a las diversas etapas de evolución del mismo candidato.