Advocación de la Inmaculada Concepción.
Patrona de: Matrimonios y Conflictos
Las madres siempre están desatando nudos en el hogar. María Santísima, la mejor de las madres, conoce muy bien los nudos que nos atan a pecados y a problemas que parecen no tener solución. Como la vemos en la pintura, ella desata nuestros nudos. Confiémoslo todo en sus manos. Sobre todo los nudos de la vida conyugal.
Esta devoción comenzó en Augsburgo, Alemania. (en alemán: Maria Knotenlöserin). La pintura original se encuentra en la iglesia de San Peter am Perlach. Es obra de Johann Melchior Georg Schmittdner, del año 1700.
La devoción se ha propagado por todo el mundo, sobre todo en los últimos años en Argentina.
La pintura nos muestra a La Virgen actuando bajo la fuerza e inspiración del Espíritu Santo que está sobre ella en forma de paloma. Está rodeada de ángeles que le asisten pues ella es la reina. A su izquierda un ángel le alcanza la cinta llena de nudos, a su derecha otro ángel recoge la cinta ya desatada.
La Virgen Desatanudos es una advocación de la Inmaculada Concepción, con la luna bajo sus pies. Ella no solo desata los nudos sino que aplasta con su pie la causa de todos ellos: la serpiente fomentadora del pecado. En la parte inferior del cuadro, un ángel guía a un hombre por la oscuridad de la vida.
La Virgen quiere ayudarnos, requiere nuestra humildad para dejarnos llevar de la mano. Hay que saber que estamos en batalla espiritual. El demonio no puede contra el Hijo de María, Jesús y anda tras sus otros hijos.
La Madre es refugio seguro.
Fuente: www.corazones.org