Mis queridos amigos de santa Teresita, de san José, del Carmen de La Habana, del Carmelo de Quito, Carmelitas Cúcuta y de tantas partes del mundo. Mi saludo con los mejores deseos de paz y bien en el Señor Jesús que está dispuesto a hacer de nuestro corazón la morada en la Él junto con el Padre sigan, desde cada uno, dando el amor y la paz que son propias de la divinidad.
Para este sexto domingo de Pascua la invitación que nos hace Jesús es clara: que le amemos, que alcancemos el don de la paz y que vivamos con intensidad cada día con la certeza de saber que Dios nos habita.
Una de características de un discípulo que ama a Jesús es que guarda sus Palabras, que las lleva como un tesoro en su corazón y hace de ellas principio de vida.
El que guarda las Palabra de Dios y desde ahí produce frutos entonces es familia de Jesús, es bienaventurado y vive en paz.
Jesús es Palabra de Dios; Palabra que fue pronunciada y que se hizo carne. Palabra que sana y que tiene poder sobre la creación. Jesús es la Palabra que debe ser escuchada y que debe penetrar nuestro ser para que el corazón empapado de Dios solo a Dios para darlo a los demás. Esa Palabra pronunciada por el Padre y que llena de amor, Palabra que se escucha y se obedece, Palabra que es revelación porque también se hace obra.
El que ama a Jesús lo escucha y abre su corazón y guarda sus enseñanzas.
El Padre ama al que escucha su Palabra, la que pronuncia en su Hijo. Ama al discípulo que cree en la Palabra y la acoge y la guarda porque sabe que es el mejor recurso para la vida. Dios viene y nos habita. La Trinidad hace del corazón del enamorado de Jesús una tienda en la que la Palabra brinda toda la paz, la serenidad que se necesita.
Con la aceptación de la Palabra como expresión de amor a Jesús nos viene la paz esa que se hace fuerza y poder porque es la certeza de saber que Dios siempre está con nosotros.
Nosotros que amamos a Jesús guardemos sus Palabra y nunca perdamos la conciencia de ser presencia de Dios en el mundo.
Con mi bendición:
P. Jaime Alberto Palacio González, ocd
Fuente: https://ocdcolombia.org
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